24 de febrero de 2011

Entornos de investigación IC Donostia

IC Donostia, como os decíamos, supone el primer workshop de Zoohaus en la Península. Esta vez nos situamos en un entorno entendido como desarrollado, donde la estandarización y el control urbano producen situaciones de un carácter muy diferente a las encontradas hasta ahora en nuestra experiencia sudamericana. Es precisamente por esto que esta nueva investigación-práctica nos resulta especialmente interesante. Propondremos la evolución en el concepto de inteligencia colectiva, poniendo en prueba su utilidad como mecanismo de transformación, con capacidad para reconfigurar la idea de progreso actual desde los campos del Diseño, la Construcción, la Arquitectura y el Urbanismo. Como áreas de interés para su investigación proponemos tres entornos o temáticas generales a tratar durante nuestras visitas a la ciudad. Por supuesto, durante los primeros días se evolucionarán a través de las aportaciones de los participantes en el taller, así que, desde ahora, se aceptan propuestas! 1-El contacto con el agua: diseños flexibles. - El Urumea: En los barrios de Loiola y Martutene -donde los bordes fluviales a base de “paseos” hormigonados aún no han alcanzado a llegar- todavía podemos encontrarnos con situaciones tradicionales de acercamiento al agua con gran interés. A partir de las tipologías tradicionales (baserris con huertas inundables y acceso directo al río), los propietarios actuales han adaptado las antiguas soluciones a la contemporaneidad. En esta situación, apreciamos el uso de las barcas (ocio, pesca o deportivo) y la presencia de huertas, unidos a cierto tipo de diseños autoconstruidos: pantalanes de acceso a la ría; jardines de borde; ubicación de las barcas sobre estructuras ligeras... - El mar : la relación de la ciudad de Donostia con el mar es clara y evidente. Proponemos el análisis de los sistemas urbanos asociados a esta situación en todos sus contextos: por un lado, los usos comunes en ciudades marítimas, intentando encontrar peculiaridades en la adaptación de Donostia: el paseo, los soportales de la Concha, los locales nocturnos cercanos, los usos terapéuticos para personas mayores, los guardacostas, la gestión segura de la playa, su limpieza y actividades; por otro lado, las implicaciones urbanas y constructivas del entorno del surf: la fabricación artesanal de tablas, la generación de asociaciones, escuelas, tiendas u otros resultados. 2-Reminiscencias rurales en entornos urbanos: las huertas espontáneas. Son varias las razones que nos llevan a fijar nuestro interés en las huertas espontáneas en el entorno de Donosita. En primer lugar porque son resultado, en su conjunto, de una apropiación ciudadana y un cambio de uso de ciertas “tierras de nadie” existentes. A través de la ocupación de fronteras entre espacio público y privado, bordes de grandes infraestructuras sin uso asociado o retazos de parcelas no incluidas en el planeamiento urbanístico, los ciudadanos modifican la estructura de la ciudad a través de sus pequeñas intervenciones. Incluyen usos necesarios para el ocio y el autoabastecimiento alimentario en un proceso autorganizado y espontáneo. Por otra parte, la evolución que esto supone: de lo rural-tradicional hacia lo urbano-contemporáneo a través de conocimientos y soluciones constructivas que se reinventan. Nos interesan las formas de cultivo (el orden de plantación de especies, los sistemas de abono naturales, los pequeños mecanismos de protección etc.), pero también los ingenios infraestructurales generados (sistemas de riego, recogida de agua de lluvia etc) y, más aún, los objetos construidos para la generación de nuevos usos fruto de esa nueva condición “urbana”: las cocinas improvisadas para reuniones con amigos, los emparrados y comedores al aire libre... 3-Organizaciones y creaciones colectivas ciudadanas: En el entorno vasco encontramos organizaciones ciudadanas de gran complejidad. Además de interesarnos por los procesos de gestión y organización seguidos por las personas de manera colectiva, creemos necesario el observar los resultados físicos o construidos de su acción sobre la ciudad. Os invitamos a analizar algunos de ellos: -Gaztetxes: Como centros sociales autogestionados, se trata de organizaciones ciudadanas que consiguen modificar el planeamiento urbanístico existente. De este modo, proponen usos dotacionales en espacios inutilizados hasta el momento, donde plantean servicios sociales y culturales que revierten en su entorno. ¿Cómo se organizan las personas que crean el Gaztetxte? ¿Cómo modifican el entorno construido para adaptarlo a sus necesidades? ¿A qué agentes se implica? ¿Qué “inteligencias” construidas encontramos en estos lugares?…. -Txokos o sociedades gastronómicas: Son entornos de gestión comunitaria, si bien se producen en espacios privados. Creemos que pueden ser estudiados de manera parecida a los gaztetxes. -La cultura del pintxo: El tiempo y la organización colectiva (factores culturales e incluso económicos muy complejos) han dado lugar a toda una vivencia cultural que rodea a esta forma gastronómica. Nos referimos, por tanto, no sólo a la evolución en la receta, si no también de otras costumbres con repercusiones físicas o constructivas sobre los espacios urbanos y su funcionamiento: modificaciones en el modo de uso y diseño de las calles de pintxos; cercanía entre bares y rutas establecidas de comidas; horario en que son servidos; compartición de creaciones entre cocineros; el zurito y el txikito como bebidas adaptadas de acompañamiento; los palillos como marcadores de número de pintxos consumidos...